PAN EDOMEX APOYA PLAN DE AUSTERIDAD DEL FRENTE CIUDADANO
*Debe acabar el derroche de recursos
Naucalpan de Juárez, México, 24 de septiembre de 2017.- El Partido Acción Nacional en el Estado de México, que preside Víctor Hugo Sondón Saavedra, respalda la posición de Ricardo Anaya Cortés, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN e integrante del Frente Ciudadano por México, que propone que el ciento por ciento del dinero de los partidos políticos vaya directamente en apoyo a los compatriotas damnificados por los sismos del 7 y 19 de septiembre.
Por lo que puntualizamos lo siguiente.
1.-El PAN con o sin presupuesto seguirá trabajando por el bien de México.
2.-Acción Nacional escucha y enarbola las causas ciudadanas y tienen razón, el ciento por ciento del dinero de los partidos debe ser para ayudar a las personas afectadas.
3.-El PAN Edomex respalda el plan del Frente porque va a fondo, es serio, de largo alcance y sin simulaciones.
4.- Apoyamos la iniciativa de ley para que de INMEDIATO se elimine el ciento por ciento del financiamiento público para los partidos políticos.
5.-El dinero de los partidos no debe provenir a los impuestos de la ciudadanía, sino de las aportaciones voluntarias de nuestros militantes y simpatizantes.
6.- Las campañas deben de ser austeras, sin despendio de dinero, de recursos que en un país como el nuestro es un verdadero insulto para los grupos desprotegidos y para todo México que tiene graves necesidades por resolver de la población.
7.- Cabe mencionar que el dinero entregado a los partidos políticos es menor del uno por ciento del presupuesto del gobierno federal, que también tiene que reorientar su presupuesto y sus gastos para beneficiar a los damnificados.
8.-El PAN apoya un verdadero programa de austeridad que incluya eliminar los gastos de seguros de gastos médicos de altos funcionarios y proponemos que sean atendidos en el IMSS o en el ISSTE y sí desean un hospital privado que lo paguen de su dinero.
9.- Se debe acabar con los derroches de recursos gastados en celulares, gasolina, comidas de altos funcionarios, así como los excesivos gastos de publicidad gubernamental, salvo los relacionados con salud, turismo y protección civil.
