Annalena Baerbock hizo este comentario en una entrevista con la cadena de televisión francesa LCI, en lo que parecía ser una primera señal clara.

Varsovia ha estado esperando la luz verde de Berlín para proporcionar sus vehículos blindados a Kiev. Sin embargo, el primer ministro polaco no quiere retrasar su ayuda:

«No nos quedaremos de brazos cruzados mientras Ucrania se desangra. Si no conseguimos el acuerdo alemán sobre los Leopard, construiremos una «coalición más pequeña» de países dispuestos a donar algunos de sus modernos tanques a una Ucrania en lucha», dijo primer ministro en un tweet.

En su discurso nocturno, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, afirmó que «el principal foco de la guerra es la cuestión de la defensa».

Mencionó que «esta semana será el momento de tomar las decisiones adecuadas» y que «ya se han preparado soluciones», que, según él, «serán justas».

Zelenski también se refirió a la visita del ex primer ministro británico Boris Johnson el domingo, afirmando que el viaje era simbólico, ya que tenía lugar el Día de la Unidad de Ucrania, lo que se produjo días después de que Johnson recibiera la medalla honorífica de «ciudadano de Kiev».

Mientras tanto, el Ministerio de Defensa ruso afirma que sus operaciones ofensivas también han «tomado líneas y posiciones más ventajosas» en las regiones de Jersón y Zaporiyia.

Y el viernes afirmó haber capturado la aldea de Klishchiivka, a sólo nueve kilómetros de Bajmut, en el este de Ucrania.

Sin embargo, los ucranianos no han hecho ningún comentario oficial al respecto, pero sí han confirmado que las fuerzas rusas se encuentran al borde de Bajmut. Parece que aumenta la presión para que se entreguen pronto tanques pesados.