ANGÉLICA RIVERA APARECE COMO HACE MUCHO NO LA VEÍAMOS

  • Sin duda, esta vez fue diferente y todo ha quedado registrado en una fotografía

México,23 de octubre de 2018.– A poco más de un mes de que concluya su papel de Primera Dama, Angélica Rivera, se enfoca en sus proyectos profesionales, aunque también se ha tomado el tiempo para convivir con la gente que más quiere.

En esta ocasión, ella se dejó ver como hace mucho no la veíamos, disfrutando un instante en compañía de uno de sus amigos más cercanos, y en una faceta fuera de cualquier protocolo oficial, como comúnmente ocurre cuando hace acto de presencia en algún evento público.

Sin duda, esta vez fue diferente y todo ha quedado registrado en una fotografía.

Rivera aprovechó estos días para convivir con uno de sus amigos más cercanos: el maquillista Alfonso Waithsman, quien reveló en sus redes sociales la foto de este momento, que también sirvió de inspiración para dedicarle a la actriz un lindo mensaje.

“Amorosa, protectora, bella por dentro y fuera, admirable.

Gracias siempre, Angélica Rivera, por tantos años de amistad…”, escribió Waithsman en esta postal que ha acumulado miles de likes y varios comentarios en Instagram.

Lo que llama la atención desde el primer instante en es look de con el que Angélica aparece en esta ocasión: una chamarra negra, pantalones y zapatos en el mismo color, así como el cabello suelto.

Por supuesto, en esta foto ambos aparecen sonrientes y dándose un abrazo, como muestra de la sólida amistad que los mantiene unidos.

Aunque no hay más detalles del motivo de la reunión, es sabido que la actriz suele mantener el contacto con sus amigos más cercanos y esta imagen es prueba de ello.

Recordemos que en días pasados, Rivera también hizo acto de presencia otro importante compromiso de uno de sus amigos más cercanos.

En aquella ocasión la Primera Dama fue vista durante el primer concierto que el cantante Chayanne ofreció en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México y, aunque no fue posible que la prensa pudiera entrevistarla, sí regaló un saludo, un beso y una sonrisa desde el interior de la camioneta negra en la que viajaba.

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